Feijoo ve «indefinida» la propuesta del Gobierno sobre financiación autonómica, con «grandes eivas» en envejecimiento y dispersión

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La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, en una foto de archivo
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, en una foto de archivo MARCOS MIGUEZ

El presidente de la Xunta reconoce «algún avance» en materia sanitaria, pero una valoración inadecuada del impacto del factor edad en la misma

04 dic 2021 . Actualizado a las 19:13 h.

«Bastante indefinida». Así ve el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, la propuesta de reforma del sistema de financiación autonómica que el Gobierno central ha puesto sobre la mesa, que mejora los criterios relacionados con la edad de la población, pero no prioriza cuestiones reclamadas por Galicia como la dispersión.

Preguntado por su valoración inicial de la proposición, durante la visita a una exposición en Vigo acompañado del alcalde de Madrid, Martínez Almeida, Feijoo apuntó que se trata de un proyecto «moi amplo, pero bastante indefinido» y que aún no han podido analizar en profundidad, debido a los más de doscientos folios del borrador remitido por el Ministerio de Hacienda. A pesar de ello, la primera aproximación le ha hecho percibir que hay «algún avance no ámbito da sanidade», pero también «dúas grandes eivas». La primera, a juicio del presidente gallego, sería una valoración «inaxeitada» del impacto que tiene en la sanidad la estructura de edad de la población. Y la segunda, una «valoración escasa» de factores como la dispersión y el envejecimiento.

Con todo, el Ejecutivo autonómico tiene todavía que analizar a fondo la propuesta de población ajustada que el ministerio le remitió este viernes. Las comunidades tienen hasta finales de enero para enviar al ministerio sus valoraciones y aportaciones a la propuesta técnica del Gobierno estatal, compuesta por 240 páginas.

En un comunicado remitido este sábado por la mañana, el Gobierno gallego avanza que en su análisis y sus proposiciones «seguirá defendendo a posición plasmada no documento acordado entre oito comunidades autónomas o pasado 23 de novembro en Santiago de Compostela, e defendendo os intereses de Galicia co obxectivo de que todos os cidadáns teñan garantido o dereito a recibir uns servizos de igual calidade con independencia de onde residen, cun modelo que asegure a cobertura total dos servizos a financiar». Es decir, reclamará que en el nuevo modelo de financiación tengan un fuerte peso los criterios demográficos y otros que encarecen la prestación de servicios, como la dispersión poblacional, además de renegar de cualquier tipo de negociación bilateral entre el Ejecutivo central y un gobierno autonómico concreto.

De hecho, la nota emitida por la Xunta incluye precisamente la insistencia de la Administración gallega en que el nuevo modelo de financiación debe abordarse «nun marco multilateral e de diálogo coas comunidades autónomas, no seo do Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF)». Y aprovecha para criticar al Ministerio por no haber convocado todavía este órgano para debatir sobre el tema del financiamiento autonómico, «desoíndo unha vez máis as peticións reiteradas das comunidades autónomas».

En esa línea, la Xunta también censura que tanto la financiación autonómica como el fondo covid hayan sido excluidos del orden del día de la próxima Conferencia de Presidentes, prevista para comienzos del próximo año. Una decisión que el Ejecutivo que encabeza Alberto Núñez Feijoo considera «unha mostra máis da falta de cogobernanza real e de diálogo coas comunidades».

Asturias insiste en sus criterios y a Cantabria le suena mal la propuesta

Otros gobiernos autonómicos están en un punto parecido. Con la propuesta recién recibida, son varios los que, como Asturias, han indicado que todavía deben estudiar un documento amplio y complejo. Con todo, el presidente asturiano, el socialista Adrián Barbón, ya ha avisado de que lo rechazarán si no recoge sus intereses, que en este punto coinciden con los de Galicia, al pedir sensibilidad con los territorios envejecidos y que sufren problemas de despoblación y dispersión. Similar posición ha expresado Castilla y León. Otro de los presidentes que acudió a la cumbre de Santiago, el cántabro Miguel Ángel Revilla, también ha dicho que analizará la propuesta, pero ha advertido que, de inicio, le suena «mal» el criterio de población ajustada por el que apuesta el ministerio. «En principio, no me gusta», ha declarado.

Mejor ha caído la proposición del Gobierno central en la Comunidad Valenciana, cuyo presidente Ximo Puig la considera «bastante alineada» con sus reivindicaciones. En Andalucía y Murcia, por el momento, consideran la propuesta insuficiente.